La Peña Zorrera ha sido siempre el peñasco más cercano, popular y admirado por las gentes de Cuevas de Ayllón. Está situado justo a la salida del pueblo hacia Liceras, cuyo camino conecta también con el Monte y El Portillo. Peña rojiza, como gran parte de las de alrededor y es la misma en la que está asentado el núcleo urbano. Aquí anidaban buitres (abantos, que se llaman por estas tierras), vencejos y grajillas. También abundaban las palomas, que tenían su casa en los cuatro palomares incrustados en la roca, de los que aún quedan tres. En la memoria popular quedó grabado el último desprendimiento de una enorme roca. Cayó en los años treinta del siglo pasado en el mes de agosto, cuando todo el pueblo estaba en las eras, trillando la mies recién segada. El estruendo debió de ser tan grande que dejó paralizados a todos. Varias de las rocas desprendidas se pueden observar a orillas del camino.